Hoy se celebra el Día Internacional del Bombero y del Bombero Forestal, una oportunidad perfecta para exaltar su labor, no solo en el cuidado de vidas humanas sino también del medioambiente. En ese marco, la secretaria de Ambiente, Carolina Urrutia, moderó un conversatorio con el director de Bomberos de Bogotá, Diego Moreno, y el director de Bomberos de California (Estados Unidos), Thom Porter.
Los expertos coincidieron en que en los últimos años ha incrementado la frecuencia e intensidad de los incendios forestales en diversas zonas del mundo y esto afecta los ecosistemas y la calidad del agua. “Estos fenómenos tienen altos costos en términos ecosistémicos, económicos y de vidas humanas. El papel de los bomberos ha ido cambiando, no es solo atender las emergencias, sino que tienen un papel más activo en la prevención y cuidado del medioambiente”, señaló la secretaria Urrutia.
En esta línea, el director Moreno, afirmó que “uno de los grandes retos es reverdecer a Bogotá y queremos adaptarnos en esa línea. Una de ellas ha sido con el mejoramiento de estaciones de bomberos sostenibles, donde queremos proteger el ambiente con sistemas de aguas lluvias y que los camiones de bomberos utilicen este recurso. También hacer la medición de huella de carbono para generar estrategias de movilidad sostenible”.
A su turno, el director de bomberos California, Estados Unidos, dijo que es clave el papel de las comunidades para reducir los impactos y que es muy importante el uso de tecnología. Además, resumió cinco aspectos que los cuerpos de bomberos deben tener en cuenta: manejo de bosque, manejo diferenciado para zonas más cerca a las poblaciones, protección de propiedad, uso de tecnología para alertas tempranas y especialización de la división forestal.
“Por ejemplo, en California las sequías continúan y las temperaturas siguen elevadas por encima de lo normal. Las temporadas de incendios eran de 6 meses y ahora están durante casi todo el año. En áreas que normalmente no se veían, los incendios siguen creciendo”, apuntó.
Recientemente el Distrito publicó el Plan de Acción Climática-PAC que prevé que a 2040 la temperatura en la mayor parte de la zona rural se incrementará en 0,25°C y, en la zona urbana, el incremento será de 0,65°C; en los Cerros Orientales y la zona sur de la localidad de Sumapaz disminuirán las lluvias hasta 15 %. Esto hace que la vegetación y el suelo sean más susceptibles al fuego y, por ende, la intensidad y severidad de los eventos con fuego sean mayores.
En Bogotá, se está trabajando en la identificación de tecnologías de alertas tempranas. “Hay que combinar la tecnología con procesos, tenemos una sala de monitoreo para condiciones ambientales y meteorológicas y así poder hacer prevención”, agregó Moreno.
Al final, los participantes coincidieron en la importancia de la educación ambiental, pues no solo los bomberos tienen responsabilidad sino también la comunidad para prevenir estos fenómenos y actuar a tiempo.
