El pasado viernes el Gobierno Australiano declaró al koala como una especie en peligro de extinción. La población de este animal ha disminuido significativamente debido a incendios que han consumido miles de hectáreas, sequías, perdida de su hábitat y enfermedades.
“Esta inclusión destaca los desafíos que enfrenta la especie. Juntos podemos asegurar un futuro saludable para los koalas y esta decisión tendrá un papel clave en ese proceso”, dijo la ministra de Medio Ambiente, Sussan Ley, en un comunicado publicado por la agencia EFE y reseñado por Revista Semana.
El informe del Ministerio de Ambiente de Australia indica que este animal se podría extinguir en el año 2050 si no se realiza una intervención urgente. La autoridad ambiental aseguró que se destinará 35.7 millones de dólares en los próximos 4 años para trabajar en la recuperación y conservación de esta especie.
Los ambientalistas del mundo han celebrado la decisión del Gobierno, sin embargo, aseguran que “nunca deberíamos haber permitido que las cosas llegaran al punto en el que corremos el riesgo de perder un ícono nacional”, dijo el gerente del Fondo Internacional para el Bienestar Animal, Josey Sharrad, reseñado por la Revista Semana.
