Con más de 20 mil huerteros y más de 4 mil huertas urbanas registradas, Bogotá se ha convertido en un referente de agricultura urbana. Las huertas son una actividad que permite la producción de alimentos saludables a través de prácticas agrícolas en espacios urbanos de la ciudad, sea en el suelo o en las terrazas de casas y edificios.
En 2021, según cifras del Observatorio Ambiental de Bogotá, el Jardín Botánico de Bogotá fortaleció, mediante el suministro de semillas, insumos y/o herramientas básicas, a 5.827 huertas de la ciudad. El apoyo incluye la creación de bancos comunitarios de semillas para el mejoramiento productivo.
La medición de este indicador se realiza a través del control de entrega de insumos y suministros a las personas pertenecientes a las huertas quienes firman un formato donde dan aval a la información reportada sobre el tipo y cantidades de insumos entregados, esta información es sistematizada y posteriormente se generan reportes de territorialización con la caracterización de las huertas nuevas que se fortalecieron.
Beneficios de las huertas urbanas:
- Se producen alimentos limpios, orgánicos y libres de químicos que sirven para el autoconsumo y no afectan la salud.
- Fortalece el tejido social porque aporta a la seguridad alimentaria nutricional, ayuda a la planificación y ordenamiento del territorio y la gestión ambiental urbana.
- Nos ayuda a tomar conciencia sobre la importancia de disminuir el impacto ambiental que generamos con el consumo, pues los residuos orgánicos que producimos a diario sirven de abono o compostaje para producir múltiples alimentos.
- Sensibiliza a las personas sobre el trabajo continuo y dedicado que requiere la siembra y la producción de alimentos sanos, y nos enseña a valorar el trabajo que realizan nuestros campesinos a diario.
- Las huertas urbanas incentivan a incluir en la dieta alimentación sana y consumo de verduras.
- Reducen casi a la mitad, la cantidad de residuos que podrían llegar de manera innecesaria al relleno Doña Juana, al convertirlos en materia prima para cultivar alimentos en casa. Invita a separar lo reciclable de lo orgánico, que luego se convierte en nuevo alimento.