El gobierno colombiano expidió un decreto para la gestión de residuos eléctricos y electrónicos. En 2017, los colombianos produjeron 275.000 toneladas de chatarra electrónica.
El 15 de febrero, el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible expidió el Decreto 284, que junto con la “Política Nacional para la Gestión Integral de los Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos (RAEE)“, se suma a la regulación de la Gestión Integral de los Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos.
La norma establece medidas para el registro de productores y comercializadores de aparatos eléctricos y electrónicos que implementará el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo. Esta regulación brinda también lineamientos para que las entidades públicas y los consumidores gestionen adecuadamente sus residuos. “Si bien el decreto comenzará a regir a partir del 16 de febrero de 2019, desde ya invitamos a toda la ciudadanía y los diferentes actores públicos y privados involucrados a conocer sus obligaciones y responsabilidades para contribuir al desarrollo de una gestión ambientalmente adecuada de los RAEE”, dijo Diego Escobar, coordinador del Grupo de Sustancias Químicas y Residuos Peligrosos del Ministerio de Ambiente.
Parte de los compromisos que reguló el decreto es que la mayoría de residuos no peligrosos entren al ciclo económico del país (es decir, que se reciclará), harán campañas de concientización sobre el manejo de estos residuos, regularán las etiquetas de los productos para que sean claras en cuanto a sus componentes y los riesgos ambientales que podrían implicar para la vida de los consumidores.
Los RAEE son una de las corrientes de residuos de mayor crecimiento en el mundo y de los más complejos de gestionar. Incluyen maquinaria, equipos médicos, antenas, etc., como a nivel doméstico (celulares, computadores e impresoras, pilas y acumuladores, bombillas fluorescentes y electrodomésticos). De acuerdo con el diario El Financiero, de México, no existen en el mundo plantas recicladoras suficientes para recuperar las sustancias tóxicas y metales contaminantes como cobre, oro, zinc, berilio, tantalio, plomo, cadmio, mercurio, litio y arsénico.
Según el reporte The Global E-waste Monitor – 2017, publicado por la Universidad de las Naciones Unidas y la Unión Internacional de Telecomunicaciones, la generación mundial de RAEE para el año 2016 fue de 44,7 millones de toneladas (unas 4.500 Torres Eiffel) y se espera que se incremente a 52,2 millones de toneladas para el 2021.
En Colombia se reportó en el 2016 una generación aproximada de 275.000 toneladas de RAEE domésticos, es decir, los que tiene en su casa, Nevera, microondas, computadores personales, teléfonos móviles. Esta cratera estima que se generarán en 2018 aproximadamente 101.000 toneladas en residuos de electrodomésticos como neveras, lavadoras, equipos de audio y video.
Sin embargo, y desde hace algunos años, hay centros de aprovechamiento de chatarra electrónica en todo el país. Una de ellas es la planta del Centro Nacional de Aprovechamiento de Residuos Electrónicos, que pertenece al programa Computadores para Educar. A este centro llegan mensualmente cerca de 90 toneladas de monitores, CPU, equipos portátiles y hasta tabletas, que provienen de las sedes educativas de todo el país. Otras opciones para desechar plas, bombillos, computadores y teléfonos viejos son las organizaciones EcoCómputo y el Banco de Alimentos de Colombia, entre otros.
