El crecimiento verde con enfoque de innovación, eficiencia energética y economía circular es una estrategia que recobra validez e importancia para mitigar y enfrentar el cambio climático. Este planteamiento va ligado a la implementación y puesta en marcha del Plan de Acción Climática presentado recientemente por la alcaldesa Claudia López y la secretaria de Ambiente, Carolina Urrutia.

 

“La sostenibilidad tiene que verse de manera integral, en diferentes dimensiones y una de ellas es la económica. Las empresas para que puedan cumplir con los compromisos y la normatividad ambiental deben tener habilidades financieras, enfoque empresarial que les permita hacer las inversiones para las transiciones tecnológicas o energética y que, a su vez, puedan disminuir los impactos ambientales”, aseguró el director (e) de Gestión Ambiental de la Secretaría de Ambiente, Diego Rubio. 

 

El desarrollo territorial y empresarial debe tener en cuenta la eficiencia en el uso de los recursos naturales y los materiales. Cerrar los ciclos de producción e implementar estrategias que permitan incorporar los diferentes residuos a las nuevas cadenas productivas es una estrategia que ayudará a reducir los impactos del cambio climático en el mediano plazo y esta acción requiere del compromiso y articulación del sector público y privado. 

 

“Debemos tener tres prioridades para impulsar el cambio en la ciudad: creación de empleo verde, producción de bienes y servicios verdes, y el desarrollo urbano sostenible. Desde la Secretaría de Ambiente, en un trabajo coordinado con las universidades de la ciudad, buscamos resolver problemas para tener mejores tecnologías con un buen costo-beneficio para el sector empresarial y lograr ser más eficientes”, agrego Rubio.