En el Visor Geográfico Ambiental se pueden consultar mapas relacionados a la Evaluación de Riesgos Climáticos (ERC), realizada por el Instituto Distrital de Gestión de Riesgos y Cambio Climático (IDIGER), con el apoyo de la Secretaría de Ambiente.
Esta evaluación identifica las amenazas y riesgos climáticos en la ciudad, proporcionando herramientas para desarrollar, priorizar e implementar acciones de adaptación y resiliencia. Según el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (IDEAM), Bogotá es la segunda ciudad más vulnerable al cambio climático en Colombia, después de San Andrés. Dentro del Distrito Capital, las localidades de Usaquén, Chapinero, Santa Fe, Usme, Ciudad Bolívar, San Cristóbal y Rafael Uribe Uribe presentan las áreas más vulnerables al cambio climático debido, a su alto riesgo, amenaza, sensibilidad y baja capacidad adaptativa.
¿Cuáles son los escenarios de riesgo climático identificados en Bogotá?
La ciudad ha experimentado eventos climáticos atípicos, como inundaciones más intensas y frecuentes, movimientos de tierra en zonas de alto riesgo, incendios forestales en los Cerros Orientales, islas de calor en áreas urbanas, y avenidas torrenciales en muchas cuencas. Estos eventos resaltan la necesidad de un compromiso conjunto de entidades gubernamentales, sector privado, academia y ciudadanía para enfrentar el cambio climático.
Inundaciones
Son producidas por exceso de agua que invade áreas que, en condiciones normales, están secas, y están relacionadas tanto con desbordamiento de cuerpos de agua, como con el encharcamiento por saturación del sistema de drenaje de aguas lluvias. Según el análisis del Índice de Riesgo Climático (IRC), se prevé un incremento de precipitación hacia el occidente de la zona urbana para el año 2040, lo que aumentará el riesgo de inundaciones en las localidades de Suba, Engativá, Bosa, Kennedy y Fontibón. Estas localidades presentan un IRC alto, siendo especialmente vulnerables debido a su proximidad a humedales, riberas de ríos y laderas de montañas.
En total, se calcula que 6.719 personas y el 30 % del área urbana se encuentran en amenaza de inundación, clasificadas en niveles alto, medio, bajo y poco probable, y coinciden con las localidades que presentan mayores índices de pobreza y densidad poblacional.
Movimientos en masa
Se encuentran influenciados por eventos de precipitación (lluvias) que, bajo ciertas condiciones, generan inestabilidad del suelo. Se calcula que 3.550.693 personas están ubicadas en zonas de amenaza por movimientos en masa.
El Índice de Riesgo Climático (IRC) para este escenario señala que el mayor riesgo está en las localidades de Usaquén, Chapinero, Santa Fe, San Cristóbal, Usme y Ciudad Bolívar, es decir, justamente en las localidades que presentan un sistema orográfico de montaña. Aunque Sumapaz también posee un sistema similar, las condiciones sociales y otros criterios hacen que allí el riesgo sea medio y bajo.
Las zonas del Distrito Capital con mayor exposición a este escenario se encuentran ubicadas al margen de los Cerros Orientales y en las localidades de Usme, San Cristóbal y Ciudad Bolívar.
Incendios forestales
Su ocurrencia está asociada al régimen bimodal de la ciudad, es decir, se presentan especialmente en las épocas de bajas precipitaciones y mayores temperaturas.
Según el IRC, las localidades de los Cerros Orientales (Usaquén, Chapinero, Santafé, San Cristóbal y parte de la localidad de Usme) presentan el mayor índice de riesgo (muy alto), seguidas de Usme (zona sur) y Ciudad Bolívar, que están clasificadas con un nivel de riesgo medio.
Avenidas torrenciales
Son crecidas repentinas producto de fuertes precipitaciones que causan aumentos rápidos del nivel de agua de los ríos y quebradas de alta pendiente.
Las localidades de Sumapaz, Ciudad Bolívar, Usme, Rafael Uribe Uribe y otras cercanas a los Cerros Orientales, presentan riesgo climático por avenidas torrenciales.
Islas de calor urbanas
Se caracterizan por mayores temperaturas de la superficie en áreas urbanas. A partir de los escenarios climáticos a 2040 se prevé un incremento de 0,65 °C en el área urbana del Distrito Capital, esto hará que el efecto isla de calor se intensifique.
El mayor índice de riesgo (alto) se encuentra en las UPZ con deficiencia de arbolado, ubicadas en las localidades de Puente Aranda, Kennedy, Engativá y Fontibón.
Para darle una mayor fuerza a las acciones climáticas en la ciudad y garantizar que se mantengan en el largo plazo, la Secretaría de Ambiente construyó la Política Pública de Acción Climática Bogotá D.C. 2050; una hoja de ruta que orienta la gestión del sector público, las organizaciones, la sociedad y los demás actores, hacia la dirección que permitirá que Bogotá D. C. se consolide como una ciudad carbono neutral y resiliente al cambio climático en el año 2050.
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