Según cifras del Cuerpo Oficial de Bomberos, en promedio colapsan cuatro árboles diariamente en la capital. Las especies que más se caen miden más de 15 metros y se caracterizan por causar erosión, invasión y desplazamiento de la flora nativa.
Desde el año pasado, el Distrito y activistas ambientales libran un intenso debate sobre el futuro de los árboles. Mientras los defensores de la naturaleza dicen que la administración está sacrificando espacios verdes por cemento, el Distrito se defiende asegurando que la tarea es indispensable, planeada y responde a la necesidad de eliminar el riesgo que representan algunos árboles enfermos o que están a punto de caer, que la cantidad es mínima y que por cada individuo talado se siembran ocho.
De acuerdo con cifras del Cuerpo Oficial de Bomberos, cerca de 250 árboles han caído en tan solo los primeros tres meses de 2019. Y entre 2017 y 2018 se incrementó en un 18 % la caída de árboles en la capital, especialmente en temporadas de lluvia. Según estas cifras, solo entre el año 2016 y 2019 colapsaron 4.243 árboles, que representan el 0,20 % del total de los árboles en la capital.
Sin embargo, la Secretaría de Ambiente recibe constantemente advertencias de posibles amenazas de caídas de árboles. Dichas solicitudes deben ser atendidas por el Jardín Botánico, que es el ente responsable de priorizar y brindar atención a los árboles en peligro. Tan solo en 2018, el Jardín Botánico tuvo que intervenir 1.235 árboles que presentaban riesgo inminente de colapso.
Algunas de las razones por las cuales se incrementan las emergencias por árboles caídos en épocas de lluvia es porque se eleva el nivel freático del suelo (acumulación de agua en el subsuelo), generando que se ablande y se debilite y, así, ocasione que los árboles sean más susceptibles al volcamiento.
Entre las especies reportadas con mayores índices de colapso en Bogotá están las acacias (japonesa, negra, baracatinga y morada), eucaliptos (común y plateado), sauco, calistemo y ciprés, entre otras, las cuales se caracterizan por causar erosión, invasión, desplazamiento de la flora nativa, altura, podas naturales, competencia por nutrientes, crecimiento inclinado, raíces excesivamente profundas y generadoras de incendios forestales, entre otros riesgos.
El Cuerpo de Bomberos informó que la caída de los árboles se debe a la falta de planeación, ya que se plantaron en lugares con condiciones adversas a estas especies. Esta es la causa de que las raíces impidan su correcto crecimiento y queden superficiales, mal ancladas, sobresalidas del suelo y con alta probabilidad de volcamiento.
Como medida de prevención, el Distrito tiene conformada una mesa de trabajo para el manejo de emergencias y desastres, que incluye dentro de su agenda la atención de emergencias silviculturales, es decir, las relacionadas con la potencial o inminente caída del arbolado urbano que pueda causar afectación sobre las personas, infraestructura o bienes en general. Por eso, se puso a disposición de la ciudadanía el número 123 o el de la Secretaría de Ambiente, 3778889.
Asimismo, el Jardín Botánico implementa medidas de prevención que incluyen actividades de manejo integral del arbolado antiguo de la ciudad y manejo integral de plagas y enfermedades. Para ello, adelanta el monitoreo permanente de aquellos árboles identificados con afectaciones críticas. Precisamente, en lo corrido de esta Administración se han atendido 62.374 árboles enfermos.